Aixerrota Clínica Dental

Solicita revisión gratuita

946 026 337

Cáncer oral

El día 4 de febrero se celebró el día mundial contra el cáncer.

Desde Clínica Dental Aixerrota queremos recordar la importancia de prevención en este tipo de enfermedades.

Siempre insistimos a nuestros pacientes en los beneficios de hábitos de vida saludables: dieta, ejercicio, vida social, etc.…

Como equipo sanitario nos dedicamos al cuidado de la boca, y queremos contaros más sobre algo muy serio como el cáncer oral, sus posibles síntomas y cómo podemos prevenirlo.

El cáncer oral es un grave problema de salud con un alto índice de mortalidad. Según la OMS, la incidencia de cáncer oral en España es de 12-15 casos/año en hombres, y de 2-4 casos/año en mujeres por cada 100.000 habitantes. La OMS prevé un aumento de casos en los próximos años. Por eso su prevención es de vital importancia.

 

¿CÓMO PODEMOS PREVENIR EL CANCER ORAL?

Para disminuir el riesgo de padecer cualquier tipo de cáncer, no sólo oral, es necesario llevar a cabo hábitos saludables.

  • Eliminar el consumo de tabaco es fundamental para minimizar los riesgos, al igual que disminuir la ingesta de alcohol.
  • También es importante reducir el riesgo de infección por el VPH (el Virus del Papiloma Humano, el mismo que causa verrugas genitales), ya que cuenta para un gran número de canceres orales en comparación con el pasado. Un tipo de VPH, el tipo 16 o VPH-16, se asocia más comúnmente con casi todos los canceres orales.

Las vacunas contra el VPH recomendadas para niños y jóvenes se enfocan en los subtipos de VPH y previenen que se pueda desarrollar esta enfermedad que esta muy asociada con causar canceres orales. Se ha demostrado que previenen la mayoría de las infecciones orales por el VPH. No está claro aún si también pueden prevenir los canceres orales.

  • Realizar revisiones odontológicas periódicas, como mínimo 1 vez al año, es otra de las medidas más efectivas de prevención.
    • Porque higiene oral y dental deficiente, o roce prolongado (crónico) a causa, por ejemplo, de prótesis dentales. Obturaciones o dientes ásperos, son factores importantes que incrementan los riesgos de padecer cáncer oral.
  • Se estima que 30-40% de todos los tipos de cáncer podrían ser evitados con estilo de vida saludables y una correcta alimentación. El aumento en el consumo de frutas y verduras en la dieta ha demostrado prevenir cáncer oral.

La recomendación sobre la ingesta de frutas y verduras es tomar 5 piezas/día (aunque, si es más, mejor) y, por lo general, consumir los vegetales crudos es mejor que cocinados.

Las frutas que mejor protegen frente al cáncer oral son los frutos rojos, como las fresas, frambuesas, arándanos o las moras, ya que contienen ácido elágico y gran cantidad de polifenoles que estimulan los mecanismos de eliminación de sustancias cancerígenas.

  • Por último, lo que podemos hacer desde prevención, y no menos importante, es autoexploración.

Al realizar una autoexploración nos encontraremos con varias cosas completamente normales: dientes, lengua, encías, paladar, mejillas con sus mucosas, frenillos labiales y lingual, úvula, amígdalas, etc. También podemos encontrar algunas variaciones poco frecuentes que no deberían preocuparnos: aftas, úlceras, herpes labial, mordiscos en las mejillas/lengua, torus mandibulares o palatinos, etc.

Los lugares más comunes para el cáncer oral son los costados de la lengua y el suelo de la boca (debajo de la lengua). Pueden aparecer manchas en los labios, revestimiento de las mejillas (mucosas), las encías, la parte delantera de lengua, el paladar y la garganta.

 

¿Cómo nos autoexploramos la boca?

  1. Nos colocamos delante de un espejo en un sitio bien iluminado y sacamos la lengua todo lo que podamos. Lo ideal es sujetarla con una gasita por la punta. Tenemos que mirar los lados de nuestra lengua y debajo de ella buscando posibles manchas blancas y rojas. Tocarla por si se detectan bultitos o durezas no habituales. Esta es la zona más común para el cáncer oral en No fumadores.  
  2. Revisa tus labios y tus mejillas. Al igual que con la lengua, buscamos manchas blancas y rojas o bultos que no deberían estar ahí.
  3. Examinamos el suelo de la boca por dentro y por fuera a la vez en busca de bultitos y/o manchas blancas y/o rojas.
  4. Revisamos el paladar- buscamos bultos, manchas o cambio en el tacto (lo normal el notar ligera rugosidad, buscamos textura más suave de lo habitual).
  5. Nos palpamos el cuello por ganglios linfáticos agrandados, lo que puede ser signo de posible infección o algo más grave.
  6. Por último, necesitaremos un depresor de la lengua (una paleta plana de madera, como las que usan los médicos) o, en su defecto, el mango de una cuchara para apretar la lengua y ver las amígdalas. Hay que fijarse en la simetría, agrandamiento, enrojecimiento o bultos inusuales.

 

¿Qué pasa si encontramos algo raro o que no debería estar ahí?

En caso de detectar algo anómalo, vamos a “ponerlo en cuarentena”, es decir, lo estaremos vigilando durante 10 dias. Si en este periodo la cosa no mejora o empeora, llama a tu dentista de confianza para pedir una cita. Siempre podemos encontrar laguna herida causada por comida dura o “afilada” (patas fritas o corteza de pan, por ejemplo) o una quemadura (por bebidas o comida muy caliente. Por lo tanto, si ves algo que no te preocupa, intenta recordar cuándo podrías haber comido algo afilado o caliente, o si te has mordido recientemente.

 

Parafraseando un dicho popular sobre los ojos, diré que, nuestra boca es el espejo de nuestra salud y bienestar. Hay que tomar en serio todo lo que pasa en nuestra boca, pero sin agobiarnos, ni relajarnos en exceso. Si tienes dudas sobre algo relacionado con tu boca, o con cualquier otra parte de tu cuerpo, llama a tu médico o dentista para concertar una cita.

 

Para terminar, quiero comentar los síntomas más comunes relacionados con cáncer oral:

  • Llagas persistentes en la boca o irritaciones que no desaparecen (manchas rojas y blancas).
  • Dolor, sensibilidad o entumecimiento en la boca, los labios o el oído.
  • Bultos no sensibles, engrosamiento, puntos ásperos, costras o áreas erosionadas.
  • Ronquera crónica
  • Deglución anormal, dificultad para masticar, hablar o mover la lengua o la mandíbula.
  • Dolor de garganta
  • Un cambio en la forma en que los dientes encajan cuando cierra la boca.

¡Si notas alguno de estos síntomas por 2 semanas o más- LLAMA a tu dentista!

Aprovecho para recordaros la importancia de las revisiones periódicas bucodentales para una detección precoz de cualquier posible patología relacionada con la boca, ya sean caries, inflamaciones o algo más serio.

¡Para cualquier duda, nuestro equipo de Aixerrota Dental, estará encantado de atenderte!

Llámanos al 946026337.

 

 

Bibliografía:

 

 

Envía https%3A%2F%2Fwww.aixerrotadental.es%2Fcancer-oral%2F por email

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *